En un nuevo giro dentro del escandaloso caso judicial contra el empresario y rapero Sean "P. Diddy" Combs, un jurado federal en Nueva York emitió este martes un veredicto parcial sobre cuatro de los cinco cargos en su contra. La decisión fue tomada tras más de una semana de deliberaciones, en el marco de un juicio que ha capturado la atención del país por las graves acusaciones de tráfico sexual, abuso y crimen organizado.
Según informaron fuentes judiciales, el panel de doce jurados logró llegar a un acuerdo respecto a cuatro cargos: dos relacionados con tráfico sexual y dos por transporte con fines de prostitución. Sin embargo, no se alcanzó un consenso en torno al cargo más severo del proceso: el de asociación ilícita bajo la Ley RICO (Ley Contra Organizaciones Corruptas e Influenciadas por el Crimen Organizado), que podría conllevar una condena de cadena perpetua.
Durante la audiencia, el juez Arun Subramanian leyó una nota enviada por el jurado en la que se indicaba que las deliberaciones estaban estancadas respecto a ese último cargo. “Hay opiniones inamovibles entre los miembros del jurado”, indicaba el mensaje. El juez instó al grupo a continuar deliberando, utilizando una “instrucción Allen”, mecanismo legal que permite al juez animar al jurado a alcanzar una decisión unánime, aunque sin ejercer presión indebida.
Los detalles específicos del veredicto alcanzado respecto a los cuatro cargos aún no han sido revelados públicamente, ya que el tribunal espera una resolución total antes de anunciar formalmente las conclusiones. No obstante, fuentes cercanas al caso confirmaron que el jurado ha solicitado revisar testimonios clave, entre ellos el de la cantante Cassie Ventura, ex pareja de Combs y una de las denunciantes principales.
El caso contra Combs ha sido uno de los más mediáticos del año, involucrando acusaciones de una supuesta red organizada de explotación sexual operada durante años bajo la apariencia de su imperio musical y empresarial. A lo largo del juicio, la fiscalía presentó evidencia que incluía grabaciones, mensajes de texto, testimonios de múltiples víctimas y excolaboradores del artista.
Por su parte, la defensa ha argumentado que las acusaciones son parte de una “campaña de difamación orquestada” con fines económicos, alegando falta de pruebas directas y poniendo en duda la credibilidad de los testigos.
El juicio, que inició a mediados de mayo, ha sido seguido de cerca tanto por medios especializados como por el público general. La figura de Sean Combs, uno de los magnates más influyentes del hip-hop en las últimas tres décadas, ha sufrido un fuerte golpe mediático desde que las investigaciones se hicieron públicas en 2023.
Se espera que el jurado reanude las deliberaciones este miércoles. En caso de no alcanzar un veredicto unánime sobre el cargo de asociación ilícita, el juez podría declarar la nulidad parcial del juicio respecto a ese cargo específico, lo que abriría la puerta a un nuevo proceso judicial.
La lectura oficial del veredicto completo, así como la posible sentencia, podría darse en los próximos días. Combs permanece detenido sin derecho a fianza desde abril, cuando agentes federales ejecutaron un allanamiento simultáneo en dos de sus propiedades.